El «divorcio exprés» se ha convertido en una de las opciones más populares entre las parejas que deciden poner fin a su matrimonio. Este procedimiento de divorcio, que se caracteriza por ser rápido y sencillo, permite a las parejas disolver su matrimonio en un plazo de tiempo reducido y sin la necesidad de pasar por un proceso judicial prolongado.
El procedimiento de divorcio exprés se inició en España en el año 2005 y desde entonces ha ido ganando adeptos. Según datos oficiales, en el año 2022 se registraron más de 100.000 divorcios exprés en el país, lo que representa casi el 60% del total de los divorcios. La mayoría de las parejas que optan por este tipo de procedimiento son aquellas que han decidido separarse de forma amistosa y que no tienen hijos menores de edad.
El divorcio exprés se realiza a través de un proceso extrajudicial y puede durar entre 1 y 3 meses. Para iniciar el procedimiento, las parejas deben presentar una solicitud conjunta ante un notario y acordar los términos de su separación, como la liquidación del patrimonio o la custodia compartida en caso de tener hijos. El procedimiento es rápido y económico en comparación con un proceso judicial tradicional, lo que lo convierte en una opción atractiva para muchas parejas que buscan un final rápido y amistoso a su matrimonio.